Karate tradicional vs karate deportivo |
La llegada de los Juegos Olímpicos
en Japón, ahora en el 2020, ya integran la participación del Karate Do[1].
En contraposición al Karate tradicional, ahora como deporte promueve la
actividad física en sistemas de combate que tienen como propósito una atencion
al carácter formativo y educativo que puede ser aplicado a cualquier edad
escolar, sexo y grado de capacidades diferenciales. En este contexto, los Juegos Deportivos Olímpicos,
aparecen como un instrumento fundamental para el fomento de la práctica
deportiva del Karate Do, en edad escolar.
Festejando el dia del niño en Sei Shi Kai Karate Do México |
Se dice que: “La iniciación deportiva, es considerada como
una etapa en la que existe un período sensitivo para la adquisición de
elementos técnicos tácticos de las diversas modalidades deportivas,
(Hechavarria, Collazo, Falero & Betancourt, 2006; Arias, 2008)[2],
entendiéndose además que esta fase es fundamental en la adquisición de patrones
cognitivo-motrices básicos y específicos, sobre los que se asienta el posterior
aprendizaje de la toma de decisiones y las habilidades motrices específicas de
un deporte (Hernández, Castro, Cruz, Gil, Guerra & Quiroga, 2000)[3]”.
Debido a las nuevas exigencias
que se derivan del ámbito de competición deportivo, dicho proceso
necesariamente induce a la reorientación del enfoque tradicional del karate,
donde se evita como sucede en el karate tradicional la deserción debido a los
procesos reproductivos y de repetición que hacen insuficiente algunas cosas de
aplicación.
En algunos autores los
argumentos que se usan para determinar qué es lo que hace mal el procedimiento
de enseñanza tradicional argumentan que hay: “Predominio del componente empírico, sustentado en la experiencia del
entrenador; Verticalización de la enseñanza (posturas, golpeos, pateos,
barridos y derribos) utilizando una lógica organizacional con enfoque
reduccionista que deja al margen la comprensión y la contextualización de la
enseñanza;prevalencia de la repetición para la apropiación de la técnica, a
partir del procedimiento frontal, lo que provoca la desmotivación y deserción
casi masiva en la fase de iniciación deportiva; Enseñanza lineal, poco
interactiva e inclusiva, en la cual el alumno se aprecia como un ente pasivo
del proceso; Deficiencias en la
selección y organización del contenido técnico - táctico del Karate Do lo cual
no se atempera a las exigencias que se derivan del contexto de competición; Irregularidades en la formación del arsenal
técnico – táctico de los atletas del Karate Do; y carencia de instrumentos que
permitan el control y la evaluación objetiva del proceso de enseñanza –
aprendizaje de los elementos técnicos - tácticos del Karate Do en el eslabón de
base”.
El enfoque tradicionalista del
karate entonces se ha encajonado dentro de una reproducción (nivel de
asimilación) y de repetición como método, subutilizando en la fase inicial del
aprendiz métodos como el de modelación, simulación y problematización, los
cuales complementan la contextualización de la enseñanza (Mendieta, 2013)[4]. En el karate deportivo ahora se busca darle
un vuelco metodológico a la enseñanza del Kárate Do, aplicando alternativas que
favorezcan la adquisición de los elementos técnicos - tácticos de esta
disciplina durante la fase de iniciación deportiva, asumiendo la incorporación
de procesos de desarrollo del pensamiento más relacionados con la producción, aplicación
y creación (Montes, Leff, Gallopin, Gutman, Vessuri, Fernández, Marulanda, Morello,
Robirosa & García, 2000)[5].
El Karate Do Deportivo, lleva
a fomentar una educación en valores, habilidades y destrezas para el desarrollo
integral del individuo para estar apto para la competición. Por eso, se le ha
prestado más interés a la actividad del karate, que se encamina, hacia la parte
educativa y socializadora; ya no solo se educa-físicamente, sino se debe tomar
en consideración que todos los niños tiene las cualidades de pensar, sentir,
interrelacionarse, disfrutar, aprender y comprender.
El beneficio que se obtiene de
la práctica del Karate Do Deportivo, es un desarrollo en el proceso motriz como
es: la ejecución apropiada de la posición corporal (actitud corporal); de su
movilidad; del cambio de posición; sobre la Relajación y la respiración (concentración
muscular (kimé) acompañado de una expiración brusca, y consiguiente relajación
final e inspiración recuperadora); y el sentido de la orientación y del ritmo
(Percepción del espacio y del tiempo).
En el proceso de la adquisición
de la perspectiva motriz, en el karate deportivo se fomenta destrezas, normas,
actitudes y valores para el desempeño de roles presentes o anticipados.
· En las normas se determinan la conducta, que moderan
el comportamiento ante una situación. Estas normas pueden ser impuestas
externamente (ejemplo tipo de etiqueta para presentarse en un torneo), o
autoimpuestas internamente de forma libre y voluntaria (la cortesía en el
saludo con un compañero; tipo de ropa para la práctica; respetuoso en los
horarios, entre otros).
·
La actitud es la forma de obrar frente a los
demás de una forma determinada. Son relativamente duraderas y varían según los
individuos y las culturas. Las actitudes derivan fundamentalmente de los
valores (Ejemplo el Dojo Kun (道場訓):
respeto a los demás).
· El valor, implica resaltar los valores
positivos de tipo humano, tanto a nivel personal, como para las demás personas
que le rodean, ideales del comportamiento humano y representarían más que el
“ser”, el “deber ser”. Estos pueden variar, dependiendo de una cultura
determinada y/o de un tiempo determinado, y en nuestro caso concreto, del tipo
de actividad deportiva que realice el niño.
En el proceso de socialización
se ha aplicado en diversas escuelas de Karate Do Deportivo, el Dojo Kun (道場訓), al
respecto en el estilo Shotokan tradicional, no considera al kárate como un
deporte de combate, sino también como una filosofía de vida, que el maestro
Gichin Funakoshi se basó en el respeto y en otros principios que tienen como
origen la estricta filosofía del confucionismo y el budismo zen, haciendo
alusión al camino del guerrero japonés medieval o samurai; los cuales se
resumen en el Dojo Kun (道場訓), o
reglas del salón de forja del practicante .
Japonés
|
Kanji
|
Traducción
|
Itosu, Jinkaku Kansei Ni Tsutomuru
Koto.
|
一丶 人格完成に努むること。
|
Lo primero, esforzarse por
la perfección del carácter.
|
Hitotsu, Makoto No Michi O
Mamoru Koto.
|
一丶 誠の道を守ること。
|
Lo primero, defender los
caminos de la verdad
|
Hitotsu, Doryoku No Seichin
O Yashinau Koto.
|
一丶努力の精神を養うこと。
|
Lo primero, fomentar el
espíritu del esfuerzo.
|
Hitotsu, Reigi O Omonzuru
Koto.
|
一丶礼儀を重んずること。
|
Lo primero, honrar los
principios de etiqueta.
|
Hitotsu, Kekki No Yu O
Imashimuru Koto.
|
一丶血気の勇を戒むること。
|
Lo primero, guardarse contra
el valor impetuoso
|
·
En la primera regla: “Hitotsu, Jinkaku Kansei Ni Tsutomuru Koto” (Lo primero, esforzarse
por la perfección del carácter). Se hace hincapié a la formación de la
personalidad. Significa educar al niño en un ambiente de confianza en sí mismo,
de seguridad y autonomía personal, con capacidad de obrar con desinhibición y
espontaneidad.
·
En la segunda regla: “Hitotsu, Makoto No Michi O Mamoru Koto” (Lo primero, defender los
caminos de la verdad). Se busca una rectitud que es potenciar una actitud
favorable a la auto superación y auto exigencia sobre la base de una aceptación
de las propias posibilidades y limitaciones, así como la misma disposición a
participar en actividades diversas aceptando la existencia de diferencias en el
nivel de destreza, manteniendo una comunicación y compostura firme y positiva
con los demás.
·
En la tercera regla: “Hitotsu, Doryoku No Seichin O Yashinau Koto” (Lo primero, fomentar
el espíritu del esfuerzo). Se busca el esfuerzo y constancia para desarrollar el
interés y la persistencia por aumentar la competencia y habilidad motoras, así
como la calidad del propio movimiento. Aprender a reconocer y valorar el
esfuerzo como un acto positivo en sí mismo.
·
En la cuarta regla: “Hitotsu, Reigi O Omonzuru Koto” (Lo primero, honrar los principios
de etiqueta). Se busca el respeto a los demás aprendiendo a valorar
positivamente las capacidades y destrezas motrices de los demás, respetando en
todo momento la mayor o menor aptitud de estos hacia la resolución y/o
ejecución de los problemas físico motores propuestos. Es fundamental empatizar
con los demás, mostrándose siempre respetuoso con la forma de actuar y pensar
de estos.
·
Y la última regla: “Hitotsu, Kekki No Yu O
Imashimuru Koto” (Lo primero, guardarse contra el valor impetuoso). Se busca
reprimir la violencia, creando una actitud de acatamiento a la normas y reglas
tanto sociales como de los juegos, fomentando a la vez el hecho de que las
personas que le rodean también las respeten.
Las reglas del Dojo Kun (道場訓), aplicadas al karate Do
deportivo, se incorpora también como un proceso educativo y socializador, y por
ende un medio a través de canalizar las mejoras psicomotrices y actitudinales
deseables sin importar a edad. La nueva
actitud del Karate Do Deportivo, no busca un rendimiento deportivo (ya
que la participación está abierto a cualquier nivel técnico), sino que la
filosofía imperante es la de participación, interrelación y fomento del deporte,
en este caso el Karate, va paralelo a estos intereses, ya que cualquier persona
podrá ser inscrito y participar sin tener en cuenta su capacidad física o rendimiento
deportivo (simplemente participar).
El karate Do Deportivo también
se relaciona con una actividad no violenta (entendiendo la violencia
como agresividad cruel), ya que se rige por unos principios éticos y morales ya
descritos anteriormente; además, esto lo vemos constantemente en la normativa,
ya que cuida en todo momento de la perfecta integridad física de los
participantes, ya sea en la modalidad de Kumite o Kata.
En Kumite, hay un Reglamento
de Competición muy estricto con el control de las técnicas, para evitar
cualquier daño físico al oponente. Es más importante la realización de los ejercicios:
gestos técnicos predefinidos e
invariables; expresión corporal; el ritmo: la orientación espacial, etc. Es
decir, si el fin último de un arte, es realizar algo bello y armonioso, en el
Karate (como Arte marcial que es), sucede lo mismo, y el material es nuestro
propio cuerpo. En definitiva, estaríamos hablando de tratar de alcanzar el
dominio de lo corporal, desde un perfecto control de lo psíquico.
En esta forma observamos como
el karate tradicional se está transformado hacia el deporte de competición y
participación. Pero también, debemos
reconocer que hay dojos, que se resisten al cambio, siguiendo un karate
tradicional, que se oponen con el karate deportivo, siguiendo una enseñanza
para el mejoramiento de la personalidad y el uso del cuerpo para aprendizaje de
defensas y ataques. Así que, ahora hay
que evaluar, hacia donde vamos, karate tradicional o karate deportivo, y eso
determinara el camino.
[1] «KARATE EN LOS JUEGOS
OLIMPICOS DE TOKYO 2020». 4 de
julio de 2017. Consultado el 31 de julio de 2017.
[2] Hechavarria, U. M., Collazo, M. A., Falero, R. R.,
& Betancourt, N. (2006). Teoría y metodología del entrenamiento
deportivo. Libro de texto. Editorial Maesa. Ciudad de la Habana, 241-243;
Arias, J. L. (2008). El proceso de formación deportiva en la iniciación a los
deportes colectivos fundamentado en las características del deportista experto.
Retos, 13, 28-32.
[3] Hernández, J., Castro, U., Cruz, H., Gil, G.,
Guerra, G., & Quiroga, M. (2000). La iniciación a los deportes desde su
estructura y dinámica. Barcelona: Inde.
[4] Mendieta, L. (2013). El proceso de
enseñanza-aprendizaje y de evaluación en relación con la formación integral de
las estudiantes de la escuela «12 de octubre» de la ciudad de Gonzanamá período
2011- 2012. Tesis de Maestría. Universidad Nacional de Loja, Ecuador.
http://dspace.unl.edu.ec/
[5] Montes, J., Leff, E.; Gallopin, G.; Gutman, P.;
Vessuri, H.; Fernández & García, R. (2000). Los problemas del
conocimiento y la perspectiva ambiental del desarrollo. Siglo XXI. Cerro
del Agua, México.